Elemento

Romeria de Ntra. Sra. de Hornuez

Romería de Ntra. Sra. de Hornuez

Cada año, el último domingo de mayo, vuelve a salir en romería La Virgen de Hornuez. Además de ser una romería emblemática, cargada de espiritualidad y devoción, también es un lugar de encuentro de los habitantes de la zona nordeste, que consideran este sitio como un lugar muy arraigado en ellos, un lugar de añoranzas y correrías de otros tiempos, de unión y buenos ratos compartidos, siempre.

 



El SANTUARIO DE NTRA. SRA. DE  HORNUEZ
 
El Santuario de  Nuestra Señora la Virgen de Hornuez se encuentra en las inmediaciones del pueblo segoviano de Moral de Hornuez,  en un entorno privilegiado rodeado de enebros y pinos.

En un principio fue una pequeña ermita que se construyó junto al enebro en el que apareció la imagen de la Virgen allá por el año 1246,y que subsistió hasta finales del siglo XVII.

Con el tiempo, y ante la afluencia cada vez más numerosa de peregrinos y devotos, se pensó en hacer un nuevo templo más amplio y armónico en su arquitectura, que albergase en su interior el enebro, como centro de la devoción mariana a Nuestra Señora la Virgen de Hornuez,  así se construyó el actual templo entre los años 1768 y 1774, con un estilo perteneciente al renacimiento italiano, una planta en forma de cruz griega rematada por una gran cúpula central bajo la que se encontraba el enebro con la imagen de la Virgen, y un templete de cuatro altares a su alrededor.

En el año 1913, se originó un incendio que destruyó por completo el templete, produciendo daños en la estructura del templo  y en la cúpula. La imagen de la virgen 5desapareció solo quedó del enebro el tronco quemado y alguna rama calcinada.

En cuanto a la imagen de la Virgen, se hizo una reproducción exacta de la desaparecida, ya que se tenían sobrados datos en medidas y detalles, que fue bendecida solemnemente en la iglesia de Moral el día 12 de septiembre de 1914, y llevada en procesión al día siguiente hasta Hornuez, e introducida en su Santuario, todavía en el lento proceso de restauración.

La imagen volvió en procesión al altar mayor de la iglesia de Moral donde estuvo hasta la conclusión de las obras del Santuario, y una vez acabadas estas, la Virgen fue repuesta en su trono o camarín para ser venerada por todos sus devotos hasta nuestros días.